Con base en Michigan, el artista gráfico Taylor Mazer ilustra con microficha, lápiz y reglas milimétricas estos pequeños paisajes que, como mucho, llegan a medir 3 centímetros de lado.
El nivel de detalles es excepcional, un muy logrado manejo de sombras y de texturas para lograr relieve. A veces, lo bueno viene en envase chico.