Llegando a un nuevo extremo de lo maravillosamente bizarro encontramos las obras del artista norteamericano Matthew Cox, que usa hilos de colores para bordar radiografías y darle un nuevo significado, completamente inesperado.
“Para mí, el bordado es algo inherentemente femenino y relacionado con el cuidado, mientras que los rayos x pueden ser considerados masculinos e impersonales” dice el artista. “Encontrar dos materiales divergentes y combinarlos crea, en mi opinión, una nueva entidad que con suerte altera la sensación de realidad del espectador”.