Y si damos un paseo por la historia del tatuaje moderno? Estas son las creaciones de Sutherland Macdonald, considerado el primer artista británico del tatuaje. Después de conocer el arte del tatuaje cuando formó parte del ejército británico, Sutherland Macdonald abrió un tattoo shop en Londres en 1889, en la Inglaterra victoriana.
Esta nueva profesión se popularizó tan rápido que el Directorio de la Oficina Postal tuvo que inventar el título de “tatuador” para incluirlo en su directorio de 1894.
Después de trabajar a mano durante muchos años, Sutherland Macdonald inventó y patentó una máquina de tatuaje eléctrica, una verdadera revolución para la época. Entre sus clientes hay muchas personalidades, como los hijos de la reina Victoria, el rey de Noruega o el rey de Dinamarca.
En la galería, una selección de sus trabajos.