Uno de los grandes íconos de la moda de nuestros tiempos, Isabella Blow fue una excéntrica fashionista que arrancó su carrera trabajando para Guy Laroche, continuando como asistente de la mismísima Anna Wintour y luego de Andre Leon Talley para luego convertirse en editora del Tatler inglés. Descubrió a talentosos diseñadores como Alexander McQueen, a quien le compró su primera colección completa por ₤5,000, y fue musa de tantos otros. Sumida en una profunda depresión, se suicidó a principios del 2007.
Su legado más importante fue el físico: una impresionante colección de prendas que fue subastada por la casa Christie’s en el 2010 y adquirida en su totalidad por su amiga Daphne Guiness para evitar que quedara desparramado en manos de extraños.
Es esta colección la que se puede encontrar hoy en la exhibición Isabella Blow: Fashion Galore! en Somerset House, Londres, con 90 vestidos de Alexander McQueen, 50 sombreros de Philip Treacy y varias piezas únicas.
Un lindo recorrido por su vida, sus raíces y un camino agridulce plagado de mementos del mundo de la moda, que cierra con un final dramático: la exhibición de La Dame Blue, la colección que en la primavera-verano del 2008 Alexander McQueen y Philip Treacy crearon en conjunto para recordar a su amiga.
Una cita imperdible, pueden pasar entre el 20 de noviembre y el 2 de marzo a recorrerla.
