Preparados, listos, ¡ya!. Sirena de largada para una nueva edición del Buenos Aires Fashion Week que arrancó bajo el mar, en un submarino diseñado por el fotógrafo William Kano, que dado el espíritu de lo nuevo de Las Pepas, bien podría haber sido amarillo.
El aire a los años ’70 es innegable en la nueva colección de la marca: mix de estampas, amplios pantalones y flores, flores por todos lados… casi como un Woodstock del siglo XXI. Es evidente la influencia de la última colección invernal de Prada en los apliques de cristales, que formando mas flores adornan solapas de sacos, cuellos de camisas, sweaters, vestidos, zapatos y los gorritos más lindos de toda la temporada.
Por supuesto no podían faltar las prendas de cuero, un clásico ya de la marca de Eva Nowodworski, siempre presente en carteras, zapatos y chaquetas de calidad y corte impecables, complementados por brocatos, sedas y terciopelos en una paleta de colores profundos: bordó, verde petróleo y azul marino con toques de violeta, azul francia, fucsia y negro.
Una apertura brillante para marcar el paso de una semana de la moda porteña que sabe ser demandante. Las chicas quieren más… y con Las Pepas, este invierno, más es más.
