Review de “Cenizas” de Nicolas Jaar: Nostalgia de un fuego pasado

Nota escrita por Eva Contreras.


Si escucharon DARKSIDE habrán notado que (perdón la redundancia gratuita) Nicolas Jaar tiene un lado muy oscuro. Creo que mucho de su éxito viene de la interpretación que él mismo hace de ese lado oscuro en una versión más clara y universal como la de algunos de sus discos; con mejor acogida del público. Pero realmente no quiero considerar el éxito como factor, porque ese criterio colectivo suele ser tan moldeable, volátil y circunstancial…

Cenizas salió el 27 de marzo de 2020, con 13 tracks y 53 minutos. Empieza con vocalización y suavidad  y después te adentra en un clima más eclesiástico. Mucho del disco tiene sonidos que no son precisamente musicales pero que forman una melodía placentera, como por inercia. Hay tracks que se sienten más canciones que otros, como “Cenizas”, “Mud” (un excelente tema, de esos que escuchás y ya te imaginas los mil remixes posibles) y “Sunder”, donde todo lo que vino antes empieza a cobrar sentido como mensaje. Ese “Is there blood on the ceiling? Do we need to be still?” se queda con vos. 

Hay temas sombríos y también hay temas como “Garden”, que te rompen el corazón y te hace evocar cosas lejanas, imposibles o recuerdos en sepia de la infancia o el campo. En general todo el álbum te saca de la comfort zone y te dice: canalizalo. Eso que sentís, canalizalo. Hice este disco para vos, para que puedas hacer catarsis y soltar porque no estás llegando solo. El último track, “Faith made of silk” te mueve sutilmente, sin llegar a bailar, y te deja así, con una intención de movimiento.

Leí muchas críticas malas, la mayoría pueden resumirse en que es “demasiado ambient” y “overwhelming”. Pero no sé me adhiero. Puede no gustarle a alguien que no tiene ganas de escuchar ambient en general. O alguien que no tiene la paciencia de escucharlo varias veces. No es un disco que te va a impactar a la primera si no estás previamente en sintonía con esa onda. Tampoco es el mejor disco de Nico, pero es muy apropiado a este momento de su vida y de nuestras vidas.

Si Cenizas hubiera salido en pleno verano sin pandemia; o en época de festivales, quizás tendría otro efecto. Pero salió en una época de soledad, introspección y aislamiento; es EL escenario para un disco así. Le falta beat, sí, pero también sé que Nico me ha dado mucho beat en otros proyectos así que lo voy a bancar por ésta vez en su faceta más minimalista.

“Con suerte, Cenizas muestra la oscuridad sólo en virtud de salir de ella. Quiero que esta música sane y ayude a hacernos preguntas difíciles sobre nosotros mismos, y nuestra relación con el estado de las cosas. Estamos viviendo una época de transformación completa, una metamorfosis – y las transformaciones están sucediendo adentro, también. Hay mucho potencial para sanación y para destrucción” – Nicolas Jaar

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *