Si a la nueva colección de Samaniego la tuvieramos que descrubir con una sola palabra, sería sexy. Mucho nos hace acordar a la nueva propuesta de Anthony Vaccarello para YSL, con sus cortes, ojalillos y tajos… ideal para una noche en la ciudad.
La propuesta de Natalia Samaniego se encuentra en estos días por Roomie, y nosotros aprovechamos para hacerle unas preguntas.
¿Cómo nace Samaniego?
La marca nace después de mi graduación. Estudié la carrera en Londres y después de adquirir cierta experiencia laboral quise volver y poner en práctica todo lo que absorbí durante ese tiempo. Siempre buscando hacer ropa que sea linda, que esté pensada dentro de un mismo punto de partida y por sobre todo que sea buena, que esté bien confeccionada y que sea eterna.
¿Cómo es tu día a día?
Mi punto de partida siempre surge de la curiosidad. Puede empezar con una época en la historia, con un movimiento social o con una película. Es siempre la curiosidad en lo desconocido que abre un montón de inspiración infinita.
¿Cómo describirías tus diseños?
Como el punto medio entre lo comercial y lo conceptual. Son prendas fáciles de vestir pero tienen una línea de congruencia entre ellas, cuentan una historia. Siempre tienen algo de rock y de los años 60, aunque tal vez muy imperceptible.
¿Que inspiración tiene la temporada de verano?
Sale de una mezcla de dos fuentes. La primera es la influencia de la película Alphaville de Jean Luc Godard. De ahí tomé la paleta de colores (blanco y negro) y algunas referencias en la vestimenta de los actores y Anna Karina. Por otro lado, para trabajar la silueta miré mucho la ropa oriental, los lazos con lo que encierran grandes piezas textiles, las asimetrías que esto genera y grandes volúmenes reducidos a pequeñas partes del cuerpo.
¿Cuáles creés que son las prendas que nadie se puede perder de la colección?
Para mí, las prendas imperdibles son el Top XX, que es una musculosa de crepe con el cuello irregular y abierta en el costado, cerrándose con un lazo de terciopelo, todas las terminaciones están cosidas a mano. Es muy elegante pero muy casual. Y también la XX jacket, porque es clásica tiene un cuello bastante grande que la hace medio romántica pero las mangas tienen una cinta de charol entrecruzada por lo ojalillos que van desde el puño hasta el hombro.